20/3/09

Unica solución por la seguridad

En una sociedad donde cada uno cuestiona las leyes que le molestan no es posible la seguridad.

Ya sé que hay delitos más graves que otros. Pero los argentinos estamos pidiendo que se respeten las leyes que no nos molesta respetar, y que no sea un problema incumplir las que nos incomodan. La misma persona, cada argentino, pide castigos e impunidad.

Si uno puede ir a 160 en una autopista porque “sé manejar”, o cruzar en rojo porque “no pasa nadie”, o cortar rutas “por la patria”, o tomar una comisaria porque “el preso es político”, o copiar cds y dvds porque “los originales son caros”, o comprar y vender dolares en cuevas porque “el dolar es más seguro que el peso”, o tomar un banco porque “cobran tasas altas”, o colgarse del cable porque “es caro”, o los estudiantes toman colegios “por más becas”, o los policías cobran coimas porque “cobran poco”, no debería resultar extraño que el ladrón diga que roba porque “tiene hambre” o porque “la víctima tiene plata” o que los asesinos maten porque “se lo merecían”.

La única vía para la seguridad, es que la sociedad toda se decida a respetar las leyes sin discutirlas. A TODAS las leyes.

Ya lo dijo Kennedy, aunque nos cuesta entenderlo: “no es lo que el país puede hacer por nosotros, es lo que nosotros podemos hacer por nuestro país”. No se trata de pedir seguridad: se trata de respetar la ley, y hacerla respetar. Ese es el único camino hacia la seguridad. Y estamos lejos de transitarlo.

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